Páginas

jueves, 28 de junio de 2012

Apareces de pronto...

Es que ya no sé que hacer. Te fuiste de un día para otro cuando eras todo lo que yo quería, todo lo que necesitaba. Te fuiste y dejaste una herida imposible de sanar. Pasaron los días y comenzaba a aceptar que no volverías, que ya te había ido para no regresar... Y de pronto, apareces de nuevo. Pidiendo perdón, diciendo que me amas y sin mi no puedes estar. Diciendo que harás lo que yo quiera para que todo vuelva a ser como antes.


¿Y ahora que hago? Si te amo más que a mi vida, pero tengo miedo de que se vuelva a repetir la misma historia, de que vuelvas a preferir tu orgullo, de que vuelvas a dejarme esa tremenda herida en el corazón. ¿Cómo tener la certeza de que no volverás a hacerlo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario